Tu padre se hace, Lucía, de vez en cuando mala sangre con las personas, animales "racionales", que le rodean; y no sirve de nada, de nada, paso un mal rato, deseo que podamos salir de este bloque de viviendas lo antes posible y poder mandar a la mierda a más de un@. Pero luego, vuelvo a ser el de siempre, y me cruzo con el vecino, o vecina, en cuestión y le saludo (vale, luego pienso, "que se joda"; pero le saludo).
Por eso me gustaría enseñarte a no hacerte mala sangre, y a no ser hipócrita; pero sobre todo a ser buena ( o a ser la más mala).
Por lo demás, sigues sin dormir del el tirón desde hace . . .
. . . ni se sabe.
A ver si ya mejoramos y nos centramos en la próxima primavera.
P.S.: No es un concepto agradable, pero la palabra tiene su fuerza, hasta su poco de belleza:
Malasangre.
P.P.S.: ¿O es que estoy más enfermo de lo mio de lo que yo mismo soy consciente?
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Es la palabra justa Roxe... algunos animales "racionales", no saben vivir en comunidad y hay que mandarlos a la mierda, lo malo es que no se van.Ten paciencia.
ResponderEliminarUn beso.
Yo también tengo algún que otro disgusto por culpa de algún vecino (los de arriba), y a veces me vuelven medio loca. Y es gente a la que le da igual todo, si uno se queja no contestan mal, pero tampoco hacen mucho caso. Por suerte el nuestro tampoco es un caso extremo, de momento. Me da que el vuestro es peor.
ResponderEliminarEspero que lo vayáis sobrellevando lo mejor posible hasta que podáis iros de ahí.