miércoles, 22 de junio de 2011

Rutinas.

Lo malo, Lucía, del paro, son las rutinas a las que tu padre se acostumbra:
Mirar ofertas, inscribirse, y esperar, y no desesperar porque no hay respuesta.
Otras rutinas son las de salir a pasear contigo cuando hay fresquito, que eso parece que este año, dicen, va a estar peliagudo; al menos tenemos el AA en casa para poder sobrellevarlo de la mejor manera posible.

2 comentarios:

  1. Cuando hace tiempo dejé de trabajar a causa del embarazo me sentí morir, me costó trabajo adaptarme. Ahora tengo ganas de regresar, pero la verdad es que poder cuidar a Vladimir todo el día me llena de satisfacción.

    Ya verás que todo se va a dar a su tiempo ;-)

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  2. A mi me pasa algo parecido: No me gusta currar, nunca he querido, y a los 16 ya empecé de buzoneador.
    ¡Si lo llego a coger con ganas!

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