De retrasos "imperdonables".

¡Querid@s legionari@s!
¿Imperdonables? ¿Retrasos?
Como ya habréis adivinado, ni una cosa ni la otra. Nada de "imperdonables", si acaso, quien ha de pedir perdón he de ser yo por no pasar ni por mi casa, ni por las vuestras, tan a menudo como debiera, pero es que no hay muchas "ganas".
El tema de Nuria sigue más o menos igual, o sea, ella de baja, sus jefes se fueron a Brasil cuando tocaba, y aquí seguimos.
Y, tu, Lucía, no sabemos si por el cambio de clima, o porque notas a mama un poco tocada, que llevas un mes intratable, a base de gritos y llantos. Esperemos que se nos pase pronto esto y tengamos las "fiestas" en paz (y que pueda pasarme más amenudo por estos lares).